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Seguramente hayas escuchado hablar de rosácea más de una vez.
Al fin y al cabo es una dolencia común.
Pero… ¿Sabes realmente lo que es? Si quieres salir de dudas no te pierdas este artículo.
¿Qué es la rosácea?
Antes de nada, debes saber que la rosácea es una enfermedad crónica.
Esto significa que es una enfermedad a largo plazo y que incluso puede no tener cura.
Pero eso no significa que siempre sea muy grave o que no se puedan paliar los síntomas.
Concretamente, la rosácea provoca un enrojecimiento de la piel sobre todo del rostro, y afecta en su mayoría a mujeres de entre 30 y 60 años.
Síntomas de la rosácea
Para poder averiguar si padeces de esta enfermedad y no lo sabías, te explicamos los síntomas habituales:
- Enrojecimiento de la piel, sobre todo en frente, nariz, mejillas y barbilla.
- Rinofima (hinchazón de la nariz) sobre todo en varones.
- Problemas oculares como sensibilidad a la luz, enrojecimiento de los ojos, visión nublada, picor…
- Aparición de pústulas y pápulas, similares al acné.
- Sensibilidad de la piel.
Algunos de los factores que provocan la rosácea pueden ser las temperaturas extremas, alteraciones hormonales, influencias emocionales…
Por eso es importante cuidarse y mantenerse alerta si aparecen los síntomas.
Tratamiento para la rosácea
A pesar de estos consejos, siempre recomendamos que acudas a un experto si tienes dudas.
1# Protección
La piel con rosácea es muy sensible, por lo que hay que utilizar siempre crema solar y evitar exponerse al sol.
También, todos los productos que emplees deben ser adecuados para pieles con esta dolencia.
2# Limpieza
Durante la limpieza del rostro, no utilices agua muy caliente, e hidrata después con una crema adecuada.
Evita usar productos con alcohol o acetona, ya que son demasiado agresivos para este tipo de piel.
3# Dieta saludable y terapia física
La alimentación es fundamental, y una de las vitaminas más relevantes para la mejora de esta dolencia es la Vitamina C.
Puedes conseguirla consumiendo verduras como el brócoli, la patata y el tomate, frutas cítricas o frutas dulces como las fresas y el melón.
También pueden contribuir a la mejora terapias como la fototerapia, masajes realizados por dermatólogos…
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Esperamos haber aclarado todas tus dudas sobre las diferencias entre tónico, agua micelar y sérum.
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¡Nos vemos pronto!
